El glifosato persiste en el suelo.

Nueva investigación innovadora muestra que el glifosato persiste en el suelo

Publicado el 17 de oct. De 2017 a 1:19 a.m. por Sustainable Pulse

Un nuevo estudio de investigación del Centro Común de Investigación de la Comisión Europea y dos laboratorios holandeses muestra que el 45% del suelo superior de Europa contiene residuos de glifosato, lo que demuestra la dependencia excesiva del modelo agrícola de la UE en este dañino herbicida químico.

A diferencia de lo que pretenden sus fabricantes, el glifosato persiste en suelos que afectan no solo la fertilidad del suelo y la calidad de los cultivos, sino también la salud humana y ambiental.

El estudio de investigación realizado por la Universidad Holandesa de Wageningen y los laboratorios Rikilt, conjuntamente con el CCI, revela que entre 317 muestras de tierra cultivable de la UE, el 42% contenía AMPA, el metabolito más tóxico del glifosato, mientras que el glifosato se encontró en el 21% del suelos; 18% de las muestras tenían ambos. El estudio se realizó en seis sistemas de cultivos a lo largo de 11 estados miembros de la UE que comprenden suelos bajo diferentes condiciones geográficas y climáticas.

Dinamarca, el Reino Unido y Portugal son los peores en este espectro, con la mayor frecuencia de detección, mientras que Italia y Grecia parecen ser los que usan menos glifosato en sus cultivos. Sin embargo, y más notablemente, estas 2 moléculas podrían encontrarse en cada estado miembro probado. Todos los cultivos evaluados presentaron residuos de glifosato y AMPA. De lejos, el peor caso fue el de los viñedos portugueses, mientras que los cultivos no exhibieron patrones de menor dependencia del glifosato en comparación con otros.

Los resultados demuestran que la acumulación y persistencia del glifosato en el suelo está subestimada por las autoridades europeas, como también lo es el daño que puede causar a los ecosistemas ambientales. Las concentraciones de glifosato y AMPA encontradas en el estudio han demostrado ser tóxicas para los organismos del suelo, tales como lombrices, bacterias beneficiosas y hongos, ya que el glifosato debilita las defensas naturales de las plantas haciéndolas susceptibles a los patógenos. Estas sustancias que son adsorbidas por las partículas del suelo no son inmóviles, sino que pueden propagarse a través del viento o la lluvia, lo que genera contaminación del aire y la exposición a través de la atmósfera, así como la contaminación de las aguas superficiales y subterráneas. La aplicación de fertilizantes también puede liberar una fracción del glifosato y AMPA unida en partículas, por lo que es directamente biodisponible para la absorción por las plantas y organismos.

Angeliki Lyssimachou, ecotoxicólogo de PAN Europa, dijo: "Este estudio contradice claramente las predicciones de las Autoridades Europeas de que el glifosato no persiste en el medio ambiente. De hecho, la agricultura europea depende en gran medida de una sustancia tóxica que ni siquiera está debidamente regulada en la UE, poniendo a todos en riesgo. Los formuladores de políticas deben detener el uso de estos químicos dañinos en la producción de nuestros alimentos. Es más que el tiempo para implementar todas las alternativas no químicas existentes a los herbicidas '.

Henriette Christensen, oficial de política agrícola de PAN Europa, agregó: "En los últimos años, un creciente cuerpo de evidencia muestra que la salud del suelo es uno de los principales impulsores del cultivo de cultivos saludables que resistirán a los ataques de plagas. El glifosato destruye la salud del suelo y conduce a más usos de plaguicidas. Nuestros agricultores deben abandonar este círculo vicioso ".